WINTERQUIM
El 21 de junio comienza el invierno en el hemisferio austral. Característico de días fríos, cortos y nublados.
Si queremos pasar un invierno agradable, la química nos puede dar algunos consejos.
La química y la física hablan de ausencia de calor para referirse al frío. El frío no existe. Un cuerpo parece frío cuando la energía térmica de sus partículas es baja. Cuando entramos en contacto con un cuerpo con partículas de baja energía térmica, le cedemos energía propia. De ahí la sensación de frío. Por lo tanto, la energía térmica se debe al movimiento de las partículas que forman la materia y la temperatura es una propiedad, medida por los termómetros.
Despues de todo, cuando hay ausencia de calor en el ambiente, nuestros cuerpos pierden energía térmica y llegan las enfermedades oportunistas del invierno. Por suerte la quimica nos ha permitido fabricar ropas de abrigo, medicamentos para curar enfermedades y por medio de algunas reacciones químicas podemos calentar nuestros cuerpos y los alimentos, etc.
La química está en todos lados y siempre nos acompaña adonde vayamos. Si queremos buscar la verdadera explicación de algo la química nos da la respuesta en muchos casos, lejos de falacias y conocimientos vulgares. Por eso, éste invierno
vamos a profundizar en el conocimiento y en la comprensión de muchos artículos y materiales que se usan en ésta estación y analizar múltiples procesos, inclusive físicos y biológicos, que ocurren. Este es el objetivo de Winterquim.
La veracidad de las publicaciones que aquí se describirán son investigaciones científicas llevadas a cabo por científicos reconocidos y avalados por Academias, Asociaciones y Sociedades de Química o relacionadas. Por lo tanto, siempre se respetará el derecho de autor al citar las fuentes de referencias. Además, el lector podrá sacar sus propias conclusiones y compartirlas en las redes sociales o por el contacto privado de ésta web.
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